Sinopsis
Dos historias de amor separadas en el tiempo pero unidas por el misterio de un cuadro desaparecido. Un peligroso juego de amenazas e intereses ocultos que cambiará la vida de los protagonistas para siempre.
Madrid, en la actualidad: hasta que El Astrólogo se cruzó en su camino, Ana, una joven historiadora del arte del Museo del Prado, llevaba una vida tranquila junto a Konrad, un rico empresario y coleccionista de arte alemán. Pero de repente llega a sus manos una carta escrita durante la Segunda Guerra Mundial que los pone sobre la pista del misterioso cuadro atribuido a Giorgione, el enigmático pintor del Renacimiento. Alentado por el enorme valor de El Astrólogo, Konrad convence a Ana para embarcarse en su búsqueda. La joven, consciente de todas las dificultades que se le presentan, pedirá ayuda al doctor Alain Arnoux de la Universidad de la Sorbona, especialista en localizar obras de arte expoliadas por los nazis. Pero esta decisión solo parece complicarle las cosas.
París, durante la ocupación alemana: el comandante de las SS, Georg von Bergheim, militar de élite y héroe de guerra, acaba de recibir una orden: debe encontrar el paradero de un cuadro de Giorgione conocido como El Astrólogo. Hitler está convencido de que la obra esconde un gran enigma, una revelación que ha pasado de mano en mano durante siglos. La búsqueda conduce al comandante hasta la joven judía Sarah Bauer, iniciándose entre ellos una persecución trepidante que tendrá consecuencias totalmente inesperadas para ambos.
-----
Poco más se puede decir después de leer este fabuloso e intrigante argumento de la novela para animar a futuros lectores, pues seguro que tras la nueva publicación de Carla Montero, "El medallón de fuego", habrá muchos que, como yo, hayan decidido o decidan próximamente conocer a Ana García-Brest; en ambas protagonista.
Desde el principio he quedado atrapado con el relato histórico de unos textos de Alejandro Magno que llegan a manos de Lorenzo de Medicis, quien decide que su mensaje nadie pueda conocerlo, pero tampoco quiere destruirlo; la solución, hacer que viaje en el tiempo escondido en algún tipo de enigma, o varios, que alguien en un futuro quizá sea capaz de desvelar, o no. Cuando esta historia llega a conocimiento de Hitler, durante la segunda guerra mundial, inicia una búsqueda del cuadro El Astrólogo, de Giorgione, creyendo que puede aportarle poderes sobrenaturales.
Tras este prólogo tan misterioso entra en escena Ana García-Brest, una experta en el pintor Giorgine, que nunca ha oído hablar del cuadro al que se refiere el documento que ha encontrado su pareja, Konrad, un empresario coleccionista de arte y antigüedades con quien mantiene una relación que podríamos catalogar como tóxica.
Cuando deciden iniciar una investigación para encontrar el cuadro, Ana viaja a París con su amigo Teo, y allí empiezan a descubrir datos acerca del expolio nazi en Francia y una lista de nombres, nazis en su mayoría, que pudieron trabajar codo con codo con Hitler, Himmler o Göring. Las primeras pistas les da un nombre en concreto, Georg von Bergheim, un especialista en arte presente en los inventarios de diversos expolios durante la segunda guerra mundial, entre ellos, la colección Bauer.
Y aquí entra otro personaje, Sarah Bauer, la posible heredera que podría reclamar los bienes y que nosotros conoceremos durante la guerra, así como su pasado familiar y las actividades que va a desempeñar en la resistencia junto a su amigo Jacob. La pista la facilita el doctor Arnaux, un colaborador que da mucho juego e intriga, tanto por las extrañas sensaciones que percibe Ana como por la historia que esconde.
Los diferentes puntos de atención en las dos épocas en las que transcurre la novela se funden en varios de los episodios, hasta tal punto que Ana se siente atraída y obsesionada por el misterioso Georg von Bergheim más que el propio cuadro. La advertencia para que deje de investigarle forma parte de una trama perfectamente calculada.
Sin llegar a ser romántica, la novela tiene varias historias de amor y muchos secretos que se desvelan en el momento preciso, tomándose su tiempo en cada uno de los desenlaces, pero sin acaparar el espacio a los otros relatos. Un cambio de ritmo que nos acompaña hasta el final.
Ana me ha convencido, estoy deseando encontrarme con ella de nuevo.
-----
Pues no me he estrenado aún con esta autora y este libro, por temática, me atrae mucho. Y viendo que lo has disfrutado, tomo buenísima nota.
ResponderEliminarBesotes!!!